Laboratorio Equino

Año: 2011

Área construida: 95 m2

Presupuesto: USD 18,000

Diseño: Mario Matamoros R.

Construcción: Mario Matamoros R.

Concepto: A pesar de su realidad urbana, Honduras se situa en una condición intersticia entre urbanismo y ruralidad. Su hinterland se ha llenado de servicios y residencias, lo cual ha traido nuevos usos a su campo. En este caso, el cliente, un veterinario con amplia trayectoria en el tratamiento de caballos, precisaba de un centro de diagnostico e inseminación artificial para caballos, cerca de su casa en Valle de Ángeles. Quería trabajar lo más cerca posible de su casa, teniendo muy pocos fondos para realizarlo y algo de madera para materializar su sueño. El concepto parte tanto de la carencia material y economica como la carencia de recursos humanos, en donde el desafío era poder construir un laboratorio con cierto grado de condiciones para operar un espacio de diagnóstico con grandisimas carencias rurales, incluso mano de obra especializada. La partida se resuelve en un cuerpo longitudinal con un area intermedia denominada manga, que formalmente destaca por louvers artesanales que dan la oscuridad necesaria para utilizar el ultrasonido. La manga divide las caballerizas para yeguas y el área de laboratorio y oficina.  La bodega, se logra a partir de la uilización de lámina acanalada, la cual crea un contraste visual con el cuerpo mayoritario que es de madera del sitio. El edificio es entonces contemporaneo pero esencial, un artefacto construido con material y obra del sitio. 

Materialidad: El laboratorio forma parte de un conjunto prestablecido de 3 edificios. Las dos casas próximas fueron construidas con madera del sitio; el laboratorio no tenia otra opción. Sus dimensiones son economicamente estratégicas, ya que su ancho corresponde al ancho comercial de las láminas acanaladas para poder reducir la cantidad de material. El edificio como tal, fue preestablecido por la cuantificación de su madera, la cual de cierta manera brindó las proporciones formales y materiales de la obra. El piso, como el resto del edificio es esencial; dos variaciones de concreto, que simplifican su limpieza y durabilidad ante las condiciones de su clima humedo. 

El mobiliario también corresponde a la carencia de recursos, al aprovecharse grandes palos para esbozar un escritorio-laboratorio en su interior y una banca en su exterior, siguiendo la premisa de que la arquitectura es el mobiliario inserto en el edificio.